Apoyo Científico y Tecnológico para el Deporte

¡Compra por teléfono!

943 300 813 | 639 61 94 94

« Volver a la noticias

Predicción de la susceptibilidad de padecer la Enfermedad Aguda de Montaña (EMA) en altitud simulada

13-06-2012  ¦  Biolaster

La enfermedad aguda de montaña (EMA) se desarrolla al ascender rápidamente a altitudes elevadas. La EMA generalmente se desarrolla a las 6-12h de haber alcanzado una altitud crítica y llega a su punto álgido a las 24h aproximadamente. Aunque hay constancia de algunas incidencias a alturas tan bajas como los 1000m, lo normal es que se experimenten a partir de los 3000m. Los síntomas más comunes asociados a esta enfermedad incluyen, náuseas, vómitos, fatiga y trastornos en el sueño entre otros y si no se trata debidamente puede dar lugar a episodios más graves y peligrosos.

Predicción de la susceptibilidad de padecer la Enfermedad Aguda de Montaña (EMA) en altitud simulada

Bustscher y col realizaron un estudio titulado "Prediction of the susceptibility to AMS in simulated altitude" en el que analizaban los diferentes estudios realizados en el campo de la prevención del Mal Agudo de Montaña, que a continuación resumimos.

La enfermedad aguda de montaña (EMA) se desarrolla al ascender rápidamente a altitudes elevadas. Algunos alpinistas la comienzan a sufrir incluso al sobrepasar los 2000m de altitud mientras que otros no la acusan hasta llegar a los 5000m. La investigación sobre los posibles factores de riesgo se ha convertido en algo muy importante. La EMA generalmente se desarrolla a las 6-12h de haber alcanzado una altitud critica y llega a su punto álgido a las 24h aproximadamente.

Aunque hay constancia de algunas incidencias a alturas tan bajas como los 1000m, lo normal es que se experimenten a partir de los 3000m. Los síntomas mas comunes asociados a esta enfermedad incluyen, náuseas, vómitos, fatiga y trastornos en el sueño entre otros y si no se trata debidamente puede dar lugar a episodios más graves y peligrosos.

El conocimiento de la susceptibilidad individual de esta enfermedad sería muy útil para poner en práctica estrategias preventivas. Por ello el objetivo de este estudio es el de comparar los estudios existentes en relación a la predicción de la susceptibilidad de padecer la EMA y dibujar las conclusiones extraídas de los más valiosos tests hasta la fecha.

Se ha realizado una búsqueda de los datos publicados hasta hoy día y se han incluido observaciones preliminares provenientes de nuestro laboratorio. La conclusión derivada de la revisión de 16 estudios, es que los valores de la saturación de oxígeno arterial (SaO2) determinados a los 20-30 minutos después de la exposición a una hipoxia simulada y equivalente a una altitud entre 2.300 y 4.200m parecen ser los más útiles para establecer la susceptibilidad de padecer la EMA.

Debido a que la activación simpática durante la exposición aguda a la hipoxia podría contribuir en gran medida al desarrollo de la EMA, incluso parámetros como la variabilidad de la frecuencia cardíaca o lactato sanguíneo podrían proporcionar esta predicción. La respuesta ventilatoria a la hipoxia es fácilmente entrenable mediante las pre-exposiciones hipóxicas pero se considera solamente una parte del complejo proceso de aclimatación.

El principal causante de la EMA es la hipoxia. Cuando los alpinistas ascienden rápidamente a los 2500m cerca de un 10% sufre este trastorno y al llegar a los 4500m el porcentaje de incidencia sobrepasa el 60%. Durante los ascensos lentos con varias noches de estancia en altitud el organismo se aclimata y la EMA se puede evitar. Además, las diferencias individuales en la tolerancia a la hipoxia y la capacidad de aclimatación pueden explicar el aumento en la incidencia de la EMA dependiente de la altitud. Las experiencias extraídas de exposiciones a altitud previas probablemente representan la predicción más valiosa para determinar la susceptibilidad de padecer la EMA pero para personas que ascienden a altitudes elevadas por primera vez, sería muy útil conocer más sobre su susceptibilidad con anterioridad. Aunque se han propuesto numerosos tests en altitud simulada, no existe un acuerdo científico sobre si estos tests son realmente útiles.

Tras analizar 16 estudios sobre las exposiciones de corta duración a altitudes simuladas para la predicción de la susceptibilidad de padecer la EMA podemos extraer los siguientes datos:

  • La mayoría de investigadores midió algunos parámetros ventilatorios y/o circulatorios en reposo y/o durante el ejercicio en hipoxia y/o normoxia.
  • Los estudios que evaluaban la respuesta ventilatoria hipóxica iso o poiquilocápnica (HVR) o la respuesta ventilatoria hipercápnica (HCVR) no lograron mostrar relación alguna entre los resultados de los tests y la EMA.

La mayoría de los investigadores que han tratado de valorar la predictibilidad de la EMA mediante exposiciones de corta duración a altitud simulada utilizaron respuestas ventilatorias y cardiovasculares para sus predicciones. Debido a las diferencias en relación a las condiciones y los parámetros medidos, en relación a la experiencia en montaña y altitud de los participantes en los estudios y especialmente en relación a las condiciones durante la exposición real a la altitud donde se desarrollaba la EMA, no se pueden extraer conclusiones claras de los estudios revisados.

La hipoxia es el principal responsable del desarrollo de la EMA, y el grado de hipoxia en la exposición aguda a elevadas altitudes, varía significativamente dependiendo de la HVR individual. Por ello desde hace tiempo se considera la HVR como predictiva de la tolerancia a la hipoxia aguda. Esto también se refleja en la mayoría de estudios que trataron de predecir la susceptibilidad de padecer EMA tras las exposiciones de corta duración a altitud simulada. Pero los tests de HVR isocápnica y poiquilocápnica no produjeron resultados unánimes.

Por el contrario, los estudios que incluían valores de SaO2 tras exposiciones hipóxicas prolongadas mostraron una relativamente cercana relación entre la SaO2 y la susceptibilidad. Por lo que se puede concluir que la SaO2 tras una exposición prolongada a altitud simulada es un valor más fiable que el HVR.

Si eres suscriptor de Biolaster y estás interesado en recibir el artículo completo de Burtscher y col (en inglés) con el título "Prediction of the susceptibility to AMS in simulated altitude", mándanos un mensaje solicitándolo aquí.

Puedes seguir estas Noticias y otras que no aparecen en el Boletín, a través de la cuenta de Biolaster en Twitter