Las Hormonas Que Promueven El Crecimiento No Estimulan El Aumento De La Fuerza. Se Derrumba Una de Las Mas Míticas Creencias Entre los Levantadores de Pesas.
28-06-2012 ¦ Biolaster
Un nuevo estudio llevado a cabo por científicos de la Universidad McMaster, y subvencionado por el Canadian Institute of Health Research revela que la Testosterona y la Hormona de Crecimiento no juegan un papel influyente en la construcción muscular tras el entrenamiento de la fuerza en contra de lo que se pensaba hasta ahora.

Todo el mundo sabe que la Testosterona y la Hormona de crecimiento juegan un papel importante a la hora de promover la construcción muscular y la fuerza. Quizá aquellos que mejor conocen sus propiedades son sobre todo los levantadores de pesas o culturistas.
En los hombres, la Testosterona juega un papel fundamental en el desarrollo de los tejidos reproductores, como los testículos y la próstata, también promueve características sexuales secundarias como el crecimiento muscular, de masa ósea y del bello. La Hormona de crecimiento por su parte, estimula el crecimiento, la reproducción y regeneración celular y es usada por las personas por sus propiedades anabolizantes o de construcción muscular.
Hasta ahora Los levantadores de pesas, culturistas y atletas en general que buscan un aumento de estas dos hormonas, siempre han creído que a través de sus duras rutinas de ejercicios en el gimnasio lograban un aumento en ambas, lo que daba lugar a un aumento de la masa muscular
Un nuevo estudio llevado a cabo por científicos de la Universidad McMaster, y subvencionado por el Canadian Institute of Health Research revela que la Testosterona y la Hormona de Crecimiento no juegan un papel influyente en la construcción muscular tras el entrenamiento de la fuerza en contra de lo que se pensaba hasta ahora.
Los hallazgos indican que los culturistas que buscan manipular estas hormonas a través de duras sesiones de ejercicio están malgastando su tiempo.
En dos estudios separados, publicados en el Journal of Applied Physiology y en el European Journal of Applied Physiology, los investigadores encontraron que las hormonas anabolizantes de las que desde hace mucho tiempo se pensaba que eran esenciales para construir la estructura muscular, no tienen influencia alguna en la síntesis de de proteínas musculares,, proceso que conduce al aumento del tamaño muscular.
“El pensamiento popular entre los levantadores de pesas es que los niveles aumentados de hormonas tras el ejercicio juegan un papel clave en la construcción muscular” explica Daniel West, autor de ambos estudios y estudiante del departamento de Kinesiología de la Universidad de McMaster. “simplemente, este no es el caso” añade.
En el primer estudio, los investigadores examinaron las respuestas de los participantes, hombres y mujeres, al ejercicio intenso de sus extremidades inferiores. A pesar de una diferencia 45 veces mayor en el aumento de Testosterona, tanto hombres como mujeres fueron capaces de producir nuevas proteínas musculares exactamente en el mismo grado.
“Teniendo en cuenta que las nuevas proteínas musculares contribuyen al crecimiento muscular, este es un descubrimiento importante” indica West.
Mientras que la función anabólica de la testosterona esta fuera de toda duda y sabiendo que promueve el crecimiento muscular en los hombres y las mujeres en grandes dosis, como las provocadas por el abuso de esteroides, estos hallazgos muestran que los niveles de Testosterona que se producen de forma natural no tienen influencia en el grado de síntesis de proteínas musculares.
En el segundo estudio, se analizaron las respuestas hormonales de 56 jóvenes de edades comprendidas entre los 18 y 30 años y que entrenaron 5 días por semana durante un total de 12 semanas.
Los hombres experimentaron ganancias en la masa muscular que oscilaron desde prácticamente ninguna ganancia hasta mas de 6kg, aunque sus niveles de Testosterona y de Hormona de Crecimiento tras el ejercicio no mostraron ninguna relación con el crecimiento muscular o la ganancia de fuerza.
Sorprendentemente, los investigadores se percataron de que el Cortisol, conocido por tener el efecto contrario a las hormonas anabólicas ya que reduce la síntesis de proteínas y a su vez destruye los tejidos, estaba relacionado con el aumento de masa muscular.
“La idea de que todos los programas de entrenamiento pueden o deberían basarse en tratar de manipular y aumentar los niveles de Testosterona y de la Hormona de Crecimiento es falsa, añade Stuart Phillips, profesor del departamento de Kinesiología. “ Simplemente no hay ninguna evidencia que soporte este concepto.” añade.
Más información: http://www.springerlink.com/content/228h54586751g19l/fulltext.pdf?MUD=MP
http://jap.physiology.org/content/112/11/1805
Twitter: @Biolaster1