Apoyo Científico y Tecnológico para el Deporte

¡Compra por teléfono!

943 300 813 | 639 61 94 94

Publicaciones

Dentro del apartado de publicaciones mostramos una serie de abstracts que nos parecen interesantes, así como el enlace al artículo original caso de que sea de acceso público.

Expansión del Volumen de Globulos Rojos en Altitud. Meta-Analisis

La aclimatacion a la altura se asocia a un rápido aumento en el hematocrito. A pesar de ello el tiempo necesario para que se produzca este aumento y la contribucion de la expansion del volumen de eritrocitos no esta todavia claro.

Leer más...

El Entrenamiento Interválico del Sprint en Hipoxia Estimula la Actividad Enzimática Glucolítica.

Hasta la fecha, la mayoría de las investigaciones que se han realizado sobre el entrenamiento y rendimiento en Hipoxia, se han centrado en deportes de resistencia. Últimamente parece que hay un mayor interés en conocer como afecta este entrenamiento en hipoxia al rendimiento en deportes o modalidades de menor duración y en las que la potencia y la velocidad son cualidades determinantes.

Leer más...

Entrenamiento en Altitud/Hipoxia. Cuestión de Respondedores y No Respondedores? O tal vez no?

Steve Ingham es un reputado fisiólogo del deporte, jefe de Fisiología en el Instituto Inglés del Deporte (EIS). En este artículo nos habla del entrenamiento en altitud/hipoxia y de su relevancia en los recientes éxitos deportivos del Reino Unido.

Leer más...

Entrenamiento y Altitud

Boulder, Colorado, se convirtió en una de las mecas del entrenamiento de resistencia en la década de 1970, cuando los fisiólogos descubrieron que el vivir en una altitud elevada producía cambios en la química sanguínea de manera que aumentaba el rendimiento a nivel del mar. Desde entonces, los científicos han aprendido mucho más sobre la relación entre la altitud y la capacidad de resistencia, y lo que han aprendido sugiere que los aproximadamente 1600m de altitud a la que se sitúa Boulder es uno de los peores ambientes posibles para que los atletas de resistencia hagan de él su hogar.

Leer más...

Entrenamiento Hipóxico Intermitente de Máxima Intensidad

La búsqueda e innovación en el mundo del entrenamiento deportivo es muy importante, pero hay que dejar claro que esta innovación no siempre significa realizar cosas llamativas o traspasar los límites con nuevas intervenciones de entrenamiento. A menudo, nos podemos encontrar con circunstancias en las que debemos prestar atención a estrategias o intervenciones de entrenamiento alternativas que puedan darnos un plus. Nick Grantham, junto al resto de componentes del equipo de ciencias y medicina del deporte planifican el programa del equipo femenino de Baloncesto del Reino Unido que competirá dentro de unas semanas y por primera vez en unos Juegos Olímpicos y a través del entrenamiento hipóxico buscan alternativas aparte de las ya rutinarias para mejorar la preparación final de sus jugadoras.

Leer más...

Los Hermanos Brownlee Preparan los Juegos Olimpicos Durmiendo en Tiendas de Hipoxia

Los Hermanos Brownlee son los máximos candidatos con el permiso del Español Javier Gomez Noya, para subir a los dos primeros escalones del pódium en Londres dentro de 47 días en la prueba de Triatlón. Alistair y Jonathan Brownlee han sido los grandes dominadores del panorama mundial en las últimas competiciones y a pesar de su juventud, sus participaciones se cuentan por victorias que van acompañadas generalmente de grandes exhibiciones. Ambos hermanos son unas de las mayores bazas para aumentar el medallero ingles en los próximos JJ.OO y supondría una verdadera sorpresa que ambos no lograsen su objetivo ante su público.

Leer más...

Entrenamiento en altitud: Un nuevo estudio aporta nuevos datos que refuerzan ideas convencionales

El entrenamiento en altitud o en altura es una técnica popular entre los deportistas que se preparan para competir al más alto nivel especialmente atletas y ciclistas. Se han conducido numerosos estudios para determinar cómo hacerlo, a que altitud entrenar, como modificar entrenamientos y cuanto tiempo permanecer en altitud. A pesar de todo, una de las principales preguntas sin una respuesta clara es la de cuándo un atleta debería regresar de la altitud para competir ?

Esta nueva investigación ayudará en la planificación del entrenamiento y de las concentraciones en altura dependiendo de las fechas de las grandes competiciones deportivas.

Leer más...

Mejora de la Economía de Carrera y Aumento de la Hemoglobina en Atletas de Elite tras Exposición a Moderada Altitud Extendida

La Exposición a la Hipoxia es uno de los métodos utilizados en la Mejora del Rendimiento Físico a Nivel del Mar, por deportistas de fondo. En ocasiones la falta de resultados objetivos, principalmente en cuanto a evolución de valores hematológicos, pone en duda la efectividad de la Hipoxia, sin tener en cuenta que la evolución de dichos valores es más lenta en el tiempo y que puede precisar exposiciones a la hipoxia más prolongadas para que manifiesten su efectividad. Nos hacemos eco de un trabajo publicado por Saunders y col, en el que se objetivan mejoras de la Economía de Carrera y en los valores de Hemoglobina, en atletas de élite que realizan una Exposición a la Hipoxia más prolongada (46 días en 12 semanas) de lo habitual, permitiendo suponer que existe una "dosis" de hipoxia mínima si queremos obtener unos resultados concretos.

Leer más...

Dentro de los diferentes métodos de mejora del rendimiento, la Hipoxia y más concretamente la Hipoxia Intermitente son unos desconocidos. Es muy difícil realizar un estudio amplio, doble ciego, bien estructurado que nos permita conocer con exactitud las repercusiones de la realización de la Hipoxia en la mejora del rendimiento a nivel del mar. Por eso es bienvenido cualquier trabajo que aclare un poco este cometido. Nos hacemos eco de un estudio publicado, en el que la realización de Hipoxia Intermitente mediante el Altipower, ha traido consigo una mejora del rendimiento físico

La exposición a la Hipoxia Artificial con el objetivo de mejorar el rendimiento físico a nivel del mar es un método que viene realizándose desde hace años. Pero los diferentes protocolos utilizados (tiempos, altitud simulada,...), la diferente respuesta individual a la hipoxia (respondedores y no respondedores), la falta de estudios concluyentes (en muchas ocasiones por falta de un número adecuado),... pone en entredicho los beneficios de la Hipoxia Artificial como método de mejora del rendimiento.

Y todavía está más en entredicho la utillización de la Exposición a la Hipoxia Intermitente (tomada en este caso la hipoxia intermitente como la alternancia entre períodos de hipoxia y de normoxia que tienen duraciones de minutos) en la mejora del rendimiento.

Para algunos, la mejora del rendimiento derivado de la utilización de la Hipoxia o de la Hipoxia Intermitente, está ligada al cambio en los parámetros hematológicos, pero los estudios nos demuestran una y otra vez que la mejora del rendimiento físico no está exclusivamente ligada a un aumento de los niveles de la serie roja, sino que está ligada también a un aumento de la capilarización muscular, de una mejora del aprovechamiento enzimático del oxígeno,... todo ello ligado al aumento del Factor Inducible por la Hipoxia.

En este caso nos hacemos eco de un estudio publicado (The influence of Intermittent Hypoxic Training on the Body of an Endurance Athlete) en el que la realización de Hipoxia Intermitente mediante el Altipower trae consigo una mejora del rendimiento físico significativa en un marchador de buen nivel competitivo.

El estudio no cumple muchos de los aspectos que nos gustaría, como que hubiese sido realizado con un grupo importante (lo ha realizado sólo una persona), que existiera un grupo control para poder delimitar y concretar los beneficios de la hipoxia sin mezclarlos con los beneficios del entrenamiento,.. pero aun así nos parece interesante traerlo a colación porque también puede servir de orientación a aquellos que estén realizando sesiones de Hipoxia Intermitente con el Altipower.

En el estudio realizado en Eslovaquia, un marchador de nivel competitivo realiza una Exposición a la Hipoxia Intermitente durante 21 días (salvo 3 días) con exposiciones de 90 minutos diarios con un protocolo de 6 minutos de hipoxia y 3 minutos de normoxia. En la evolución del trabajo de Hipoxia Intermitente, se va disminuyendo de forma progresiva la concentración de oxígeno lo que da lugar a una disminución de la saturación arterial de oxígeno.

Para controlar la evolución del trabajo realizado, el atleta es sometido previamente a la Exposición y con posterioridad a 3 tipos de pruebas:

  • Un Test Ergoespirométrico.
  • Un Test de campo de 3 kms.
  • Un análisis de sangre.

Entre los resultados cabe destacar un aumento significativo del Consumo Máximo de Oxígeno, una mejora del Rendimiento en el Test de Campo y un mantenimiento de los valores de Hemoglobina y Hematocrito con un aumento de los Reticulocitos.





La realización de un Entrenamiento de Hipoxia Intermitente en reposo, durante 1 hora al día, 5 días a la semana y 3 semanas de duración, mejora el rendimiento de fondo en ciclistas y triatletas de competición. Este es el resultado de un estudio realizado por Bonetti y colaboradores, del Instituto de Investigación en Deporte y Recreación de Nueva Zelanda, que ha sido publicado en el International Journal of Sports Physiology and Performance

Bonetti y colaboradores han realizado un estudio en el que han participado 27 ciclistas y triatletas de nivel competitivo, con el fin de comprobar la eficacia de un programa de entrenamiento de hipoxia intermitente sobre el rendimiento en bicicleta y de evaluar si es más efectiva la realización de protocolos de hipoxia intermitente en los que las alternancias entre hipoxia y normoxia son de 3 minutos o de 5 minutos.

Tras el estudio se concluye que la realización de 15 sesiones de 60 minutos de hipoxia intermitente en 3 semanas, da lugar a una mejora del rendimiento en relación a un grupo control que estaba realizando el mismo entrenamiento físico, pero que no hay diferencias significativas entre la realización de intervalos de hipoxia-normoxia de 3 minutos o de 5 minutos.

El estudio publicado con el título "Cycling Performance Following Adaptation to Two Protocols of Acutely Intermittent Hypoxia" en la revista International Journal of Sports Physiology and Performance, es de interés para todos aquellos que estudian los efectos de la hipoxia sobre el rendimiento y la traducción del abstract es el siguiente:

Evolución del Rendimiento en Ciclismo tras la Adaptación a dos protocolos de hipoxia aguda intermitente

Objetivo:

La adaptación a la exposición hipóxica aguda intermitente parece que vale la pena para producir mejoras en el rendimiento de resistencia, pero la actual duración de 5 minutos de la hipoxia y los intervalos de recuperación puede no ser óptima.

Métodos:

Dieciocho hombres ciclistas y triatletas de nivel competitivo fueron asignados al azar a uno de los dos grupos de hipoxia intermitente, mientras otros nueve deportistas de nivel similar representaron un grupo de control. Los deportistas que realizaron hipoxia fueron expuestos a 60 minutos por día de hipoxia intermitente consistente en la alternancia entre intervalos de hipoxia y de normoxia con duraciones de 3 ó 5 minutos según el grupo asignado. Las exposiciones se realizaron en reposo durante 5 días consecutivos por semana durante 3 semanas. La saturación de oxígeno, monitorizada mediante pulsioximetría, se redujo progresivamente de 90% (día 1) al 76% (día 15). Todos los deportistas mantuvieron su habitual entrenamiento del período competitivo en el que se encontraban a lo largo del estudio. Tests incrementales y repetidas pruebas de sprint se realizaron previamente al estudio, 3 días post-hipoxia, y 14 días post-hipoxia. Se tomaron igualmente muestras de sangre venosa en reposo, pre-estudio, intra-estudio, y post-estudio.

Resultados:

No hubo diferencias claras entre los efectos de los dos tipos de tratamiento hipóxico en el rendimiento o sobre diferentess medidas de transporte de oxígeno, hematopoyesis, e inflamación. En comparación con el grupo control, el conjunto de grupos de hipoxia mostraron mejoras claras en la potencia máxima (4,7%; límites de confianza del 90%, ± 3,1%), relación lactato-potencia (4,4% ± 3,0%), y relación frecuencia cardíaca-potencia (6,5% ± 5,3%) a los 3 días postintervención, pero a los 14 días los efectos no son claros. Los cambios en otras mediciones a los 3 y 14 días postintervención fueron leves o poco claros.

Conclusión:

La hipoxia aguda intermitente produce una sustancial mejora en el rendimiento de resistencia, pero el beneficio relativo de los intervalos de exposición de 3 - frente a 5-minutos sigue siendo poco claro.





El denominado Mal de Altura o Mal Agudo de Montaña, es un síndrome que afecta a las personas susceptibles que ascienden con demasiada rapidez a altitud y presentan una sintomatologia leve la mayor parte de las veces, pero que en ocasiones se puede agravar llegando incluso a la muerte. La incidencia del Mal de Altura es más frecuente en aquellas personas que responden a la altitud con una importante disminución de la Saturación Arterial de Oxígeno. Dado que la exposición contínua a la Hipoxia Artificial y que la realización de Hipoxia Intermitente dan lugar a un aumento de la Saturación Arterial de Oxígeno ante las mismas condiciones de hipoxia, cabe concluir que este tipo de entrenamiento (hipoxia artificial o hipoxia intermitente) puede prevenir la aparición del Mal de Altura

El Mal de Altura se caracteriza por aparecer en personas que presentan una susceptibilidad especial y que suben a una altitud en general por encima de los 2000-2500 metros sin aclimatación previa y cuyos síntomas comienzan a aparecer al cabo de 6-10 horas de exposición a la hipoxia; ocasionalmente los síntomas comienzan a aparecer incluso sólo 1 hora después del comienzo de la hipoxia.

La sintomatología del Mal de Altura es habitualmente leve y consiste en cefalea, dificultad para dormir, pérdida de apetito, vómitos y malestar general; sin embargo en ocasiones se agrava la sintomatología pudiendo llegar a sufrir un edema pulmonar o un edema cerebral que pueden dar lugar a alteraciones neurológicas, cardíacas, pulmonares,? pudiendo desembocar en el coma e incluso la muerte si no se instaura un tratamiento correcto.

Tal y como objetivan diferentes estudios de investigación, el Mal de Altura está relacionado con la disminución de la saturación arterial de oxígeno; en este sentido, en la revista High Altitude Medicine & Biology se acaba de publicar un estudio de Jack A. Loeppky y colaboradores titulado Hypoxemia and Acute Mountain Sickness: Which Comes First?, donde dicen: La principal observación en este estudio es que demostró que los sujetos sensibles al Mal de Altura (AMS = Acute Mountain Sickness) al cabo de 8 a 12 h de estancia en altitud simulada, tenían una hipoxemia significativamente mayor (mayor descenso de la saturación arterial de oxígeno) tras la primera hora de la exposición que aquellos sujetos que no sufren el Mal de Altura; concluyen que una hipoxemia temprana importante puede ser útil para predecir la susceptibilidad de una persona a sufrir el Mal de Altura (AMS).

Por otra parte, está demostrado y publicado en diferentes estudios que la realización de sesiones de hipoxia intermitente dan lugar a un aumento progresivo de la saturación arterial de oxígeno ante las mismas condiciones de hipoxia. Un ejemplo de estos estudios es el publicado por Katayama y col en la revista High Altitude Medicine & Biology con el título Effect of a Repeated Series of Intermittent Hypoxic Exposures on Ventilatory Response in Humans. En este estudio los participantes realizan hipoxia normobárica (con 12% de oxígeno) durante 1 hora al día, y los valores de Saturación Arterial de Oxígeno aumentan de forma significativa a partir del octavo día.

Este aumento de la saturación arterial de oxígeno con la exposición a la hipoxia intermitente puede explicar la disminución de casos de Mal Agudo de Montaña entre aquellas personas que previamente a viajar a alta altitud se someten a un programa de hipoxia artificial. Beidleman y col han demostrado que 3 semanas de Hipoxia Intermitente suponen una alternativa eficaz a la residencia en altitud, aumentando la ventilación en reposo y reduciendo la incidencia y severidad del Mal Agudo de Montaña. Puedes acceder al artículo completo de forma libre y gratuita aquí.





La exposicion a la hipoxia esta siendo utilizado como un metodo de mejora del rendimiento fisico tanto en altitud, como a nivel del mar. La hipoxia da lugar a un aumento del Factor Inducible por la Hipoxia (HIF) que estimula diferentes genes involucrados en la eritropoyesis, en la sintesis de mioglobina y hemoglobina, en la glucolisis, en el transporte de glucosa y en la angiogenesis (formacion de nuevos capilares o vasos sanguineos).

Diferentes estudios publicados van demostrando que la hipoxia supone un método que puede ayudar en la mejora del rendimiento físico, pero dicha mejora no viene exclusivamente por un aumento de los valores hemáticos (hematies, hemoglobina, hematocrito) a través de la estimulación de la Eritropoyetina, como muchas veces se intenta hacer ver.

Existen otras adaptaciones que intervienen directamente en la mejora del rendimiento físico. Entre estas adaptaciones se encuentra un aumento de los capilares sanguíneos, lo que da lugar a una mejora en la utilización del oxígeno a nivel celular. La angiogénesis (o formación de vasos sanguíneos) está regulada por el VEGF (Vascular Endothelial Growth Factor, o Factor de Crecimiento del Endotelio Vascular) y los niveles de este factor de crecimiento están mediados por el Factor Inducible por la Hipoxia (HIF).

No hay duda alguna que la Hipoxia supone un estímulo muy importante en el aumento del VEGF (Vascular Endothelial Growth Factor), vía Factor Inducible por la Hipoxia (HIF) pero según un articulo publicado en el último número de la revista High Altitude Medicine & Biology, parece que existen también otros factores que pueden activar el aumento del VGEF.

En el artículo realizado por Ellen Breen y col. de la Universidad de California en San Diego y titulado Skeletal Muscle Capillarity during Hypoxia: VEGF and Its Activation se llega a la conclusion de que existen diferentes señales celulares que pueden incrementar el estímulo de la exposición a la hipoxia en el aumento de expresión del VEGF en los miocitos, que son:

  • Disminución en la presión intracelular de O2.
  • Inflamación del músculo esquelético, asociado a citokinas y al estres oxidativo.
  • Incremento de la actividad de la AMP kinasa, acompañando auna reducción del potencial energético celular.


Estas tres situaciones intracelulares pueden producirse como consecuencia de la realización de ejercicio físico. Por tanto, cabe concluir que la realización de ejercicio físico en hipoxia, puede suponer un estímulo añadido en la activación del VEGF (Factor de Crecimiento del Erndotelio Vascular), con lo que se estimula la neoformación de vasos sanguíneos y dando lugar a una mejora del rendimiento físico por sí mismo.





Una sesión de hipoxia de 120 minutos en las que se combina reposo y ejercicio es suficiente para estimular la producción natural de Eritropoyetina (EPO), según un estudio realizado por Mackenzie y col y que se publica en el último número de la revista "High Altitude Medicine & Biology".

En el último número del High Altitude Medicine & Biology se publica un artículo de Mackenzie y col. titulado "Acute Normobaric Hypoxia Stimulates Erythropoietin Release" en el que explica los cambios en los niveles de eritropoyetina (EPO) tras una sesión de hipoxia que combina reposo y ejercicio. Hay que tener en cuenta que según algunos estudios realizados la máxima concentración de EPO alcanzada tras un estímulo hipóxico no se obtiene al final del estímulo (cuando el tiempo de estimulación es corto como en este caso), sino que puede retrasarse en el tiempo (véase artículo de Rodriguez y col) con lo que estos hallazgos tienen aun más relevancia. Igualmente establecen una correlación entre la disminución en la Saturación Arterial de Oxígeno y la liberación de eritropoyetina, tal y como se ha establecido en otras investigaciones con lo que se potencia el uso de la saturación arterial de oxígeno como índice de intensidad del estímulo hipoxico. Dada la relación de los contenidos de este artículo con los objetivos que se persiguen con los aparatos de Hipoxia que comercializamos, hemos creido interesante traducir el abstract del artículo.



La Hipoxia Normobarica aguda estimula la produccion de Eritropoyetina

Las investigaciones que han estudiado la secreción de EPO (eritropoyetina) en respuesta a la hipoxia aguda han dado lugar a resultados variables. Además, los errores asociados a los distintos métodos utilizados para determinar la EPO no están bien documentadas. El propósito del presente estudio fue determinar la respuesta de la EPO en 17 hombres entrenados ante una exposición aguda, bien a la hipoxia normobárica (Hy; n 10) o a normoxia (Con; n 7). Un objetivo secundario era determinar el error asociado con la medición de la EPO. Después de las pruebas basales, el grupo de tratamiento (Hy) fue sometido a una sóla exposición a la hipoxia (FIO2 0,148; 3100 m), consistente en una exposición en reposo de 90 minutos, seguida de un período de 30 min de ejercicio en hipoxia al 50% del VO2max. Las muestras de sangre venosa se tomaron previas (0 min) y posteriores (120 min) de cada prueba para evaluar los cambios en plasma de la Eritropoyetina (EPO). El grupo control (Con) fue sometido al mismo diseño experimental, pero situado en todo momento en un entorno normóxico (FIO2 0,2093). El grupo Hy tuvo un incremento medio en la EPO [19.3 (4.4) vs 24.1 (5.1) mU / ml], p 0,04, tras 120 min de hipoxia normobárica. El cálculo del error técnico de medición de EPO fue de 2,1 mU / mL (9,8%). Se llegó a la conclusión de que una exposición aguda a la hipoxia, tiene la capacidad de elevar el nivel de Eritropoyetina (EPO) plasmática. Este estudio también demuestra que el aumento de los niveles de EPO fue 2 veces mayor que el error de medición calculado.





El entrenamiento en altitud real o simulada está siendo utilizado por deportistas, principalmente de fondo, con el objetivo de mejorar su rendimiento a nivel del mar. Hay autores que relacionan la mejora del rendimiento al aumento de parámetros hematológicos, como la hemoglobina o el hematocrito, pero hay también mecanismos no hematológicos que justifican la mejora del rendimiento tras el entrenamiento hipóxico.

Desde la Olimpíada de México en 1968, el entrenamiento en altitud ha sido utilizado por deportistas de fondo (maratonianos, ciclistas, nadadores,...) con el objetivo de mejorar su rendimiento en las competiciones a nivel del mar.

En los últimos años se ha producido un aumento de los deportistas (no sólo de fondo) en la utilización de la hipoxia, debido al desarrollo de diferentes sistemas de hipoxia artificial, con lo que el estudio de las adaptaciones a la hipoxia y sus repercusiones en el rendimiento físico han aumentado considerablemente este área del conocimiento.

Hay autores que relacionan la mejora del rendimiento físico derivado del entrenamiento hipóxico con el aumento de los valores sanguíneos que trae consigo; y como hay personas que sometidas a un entrenamiento hipóxico no tienen variaciones significativas de sus parámetros hematológicos, han justificado esta falta de reacción estableciendo la existencia de 2 grupos de personas en función de su respuesta a la hipoxia, los "Respondedores" y los "NO Respondedores".

Sin embargo el estímulo hipóxico trae consigo muchos más cambios derivados de la estimulación del Factor Inducible por la Hipoxia que el aumento de la Eritropoyetina que es la responsable de los cambios hemáticos. Y por ello hay mecanismos NO hematológicos que intervienen en la mejora del rendimiento físico derivado del entrenamiento en altitud simulada o hipoxia.

En este sentido se ha publicado un interesante artículo en el último número de la revista "Medicine and Science in Sports and Exercise" titulado Nonhematological Mechanisms of Improved Sea-Level Performance after Hypoxic Exposure y realizado por Gore CJ, Clark SA y Saunders PU, del Instituto Australiano del Deporte.



La utilización de la Hipoxia Intermitente en la mejora del Rendimiento Físico se está convirtiendo en un apartado cada vez más importante en la preparación de los atletas de alto nivel. La aprobación de la Agencia Mundial Antidopaje de la utilización de los sistemas de hipoxia artificial para la mejora del rendimiento no ha hecho sino potenciar estos sistemas. No obstante, existen todavía lagunas en el conocimiento de la hipoxia y sus repercusiones que no están permitiendo optimizar este tipo de estímulo.

El denominado entrenamiento de Hipoxia Intermitente está teniendo cada vez más adeptos en el mundo de la alta competición, ya que la mejora del rendimiento físico que trae consigo puede determinar la posición final o la marca conseguida en una competición de máximo nivel.

Sin embargo todavía existen muchas incógnitas en el conocimiento de la adaptación a la hipoxia y en el modo más efectivo de conseguir efectos beneficiosos añadidos.

En este campo todavía emergente procuramos aportar un poco más de luz en su conocimiento, por lo que hemos decidido comenzar la publicación de un artículo dedicado a las Claves del Entrenamiento Hipóxico Intermitente.

Iremos desarrollando aspectos relacionados con la individualización del entrenamiento, índices de carga aplicables, principio de sobrecarga, de progresividad,... todo ello dirigido al entrenamiento hipóxico.


Ir al artículo sobre las Claves del Entrenamiento Hipóxico Intermitente





Efecto de la exposición a la hipoxia normobárica intemitente en reposo sobre parámetros hematológicos, fisiológicos y de rendimiento en atletas multi-deporte

Michael John Hamlin & John Hellemans

Journal of Sports Sciences, Febrero 2007; 25 (4): 431-441

El objetivo de este estudio era determinar si 3 semanas de exposición a la hipoxia normobárica intermitente en reposo eran suficientes para provocar cambios que beneficiaran a atletas multi-deporte. 22 atletas multi-deporte de variado nivel fueron expuestos, bien a un gas hipóxico normobárico (grupo de entrenamiento hipóxico intermitente) o a un gas placebo conteniendo aire normal (grupo placebo). Los participantes respiraron las mezclas de gas en períodos de 5 minutos interrumpidos con 5 minutos de períodos de recuperación en los que se respiraba el aire ambiente normal, durante un total de 90 minutos al día, 5 días por semana, y a lo largo de 3 semanas. El oxígeno en el gas hipóxico disminuyó desde un 13% en la primera semana hasta el 10% en la tercera semana. Los grupos placebo e hipóxico realizaron un total de 4 tests de rendimiento, incluyendo uno de familiarización y otro para obtener valores basales antes del experimento, seguidos por nuevos tests a los 2 días y 17 días después de completado el proceso de exposición a la hipoxia. El tiempo necesario para realizar 3 kms de carrera disminuyó en el grupo de hipoxia un 1,7% (95% intervalo de confianza (CI)= -0,6 -3,9%) tras 2 días, y en un 2,3% (CI=0,25-4,4%) 17 días después de la última sesión de hipoxia, con respecto al grupo placebo. Cambios significativos en el grupo de hipoxia en relación al grupo control también incluyeron un aumento del contaje de reticulocitos 2 días (23,5%; CI= -1,9 a 44,9%) y 12 días (14,6%; CI= -7,1 a 36,4%) post-exposición. El efecto del entrenamiento hipóxico intermitente sobre el rendimiento en el tiempo en 3 kms encontrado en este estudio es ligeramente beneficioso, lo que sugiere que atletas multi-deporte no de élite podrían beneficiarse de este tipo de entrenamiento para mejorar su rendimiento.



Entrenamiento físico en Hipoxia Normobárica en Atletas de Fondo. I. Mejora en la capacidad de rendimiento aeróbico

Dufour SP, Ponsot E, Zoll J, Doutreleau S, Lonsdorfer-Wolf E, Geny B, Lampert E, Flück M, Hoppeler H, Billat V, Mettauer B, Richard R, Losdorfer J.

Journal of Applied Physiology 100:1238-1248 (2006)

Este estudio investiga de qué manera un entrenamiento dde hipoxia intermitente de 6 semanas, diseñado para evitar reducciones en las cargas e intensidades de entrenamiento, mejora la capacidad de rendimiento aeróbico en corredores de fondo de nivel competitivo. Dieciocho atletas eran aleatoriamente asignados a entrenar en normoxia [grupo Nor; n = 9; consumo máximo de oxígeno (VO2max) = 61,5 ml/min/kg +- 1,1 ml/min/kg] o de forma intermitente en hipoxia [grupo Hyp; n = 9; VO2max = 64,2 +- 1,2 ml/min/kg]. En su planificación de entrenamiento habitual en normoxia, los atletas incluyeron dos sesiones semanales de entrenamiento de alta intensidad (a nivel del umbral ventilatorio 2) y duración moderada (24-40 minutos), desarrolladas bien en normoxia fracción de O2 inspirado (FiO2) = 20,9%] o en hipoxia normobárica (FiO2 = 14,5%). Antes y después del entrenamiento, todos los atletas realizaron 1) un test progresivo en normoxia e hipoxia para determinar el VO2max y los umbrales ventilatorios (primer y segundo umbral ventilatorio) y 2) un test máximo a la velocidad mínima preentrenamiento en la que se alcanzaba el VO2max para determinar su tiempo límite o tiempo hasta el agotamiento (Tlim) y los parámetros de la cinética del consumo de oxígeno (VO2). Solo el grupo Hyp mejoró significativamente el VO2max (+5% a ambas FiO2, p<0,05), sin cambios en la capacidad de transporte de oxígeno de la sangre. Además el Tlim se alargó sólo en el grupo Hyp (+35%, p<0,001), sin modificaciones significativas en la cinética del VO2. A pesar de realizar unas cargas de entrenamiento similares, el grupo Nor no mostró tales mejoras en dichos parámetros como un VO2max sin cambios (+1%, no significativo), Tlim (+10%, no significativo) y cinética del VO2. Las mejoras del Tlim en el grupo Hyp no estaban correlacionadas con modificaciones del otros parámetros, incluyendo VO2max o cinética del VO2. El presente modelo de Entrenamiento Intermitente en Hipoxia, incluyendo sesiones específicas de entrenamiento de alta intensidad y moderada duración en hipoxia, puede potenciar los estímulos metabólicos del entrenamiento en atletas ya entrenados y mejorar las adaptaciones musculares periféricas, resultando en un incremento en la capacidad de rendimiento de fondo.



La Hipoxia Intermitente aumenta la tolerancia al ejercicio en hombres mayores, con o sin enfermedad coronaria

Burtscher M, Pachinger O, Ehrenbourg I, Mitterbauer G, Faulhaber M, Puhringer R, Tkatchouk E.

Department of Sport Science, Medical Section, University of Innsbruck, Furstenweg 185, 6020 Innsbruck, Austria

Se ha sugerido que la hipoxia intermitente aumenta la tolerancia al ejercicio incrementando la resistencia al stress y mejorando el aporte de oxígeno. Dado que el aumento de la tolerancia al ejercicio reduce la mortalidad en los mayores con o sin enfermedad coronaria, la hipoxia intermitente puede ser una herramienta válida desde el punto de vista preventivo y terapéutico. Sin embargo hay una falta de estudios controlados.

METODOS Y RESULTADOS: Dieciseis hombres (50-70 años, 8 con y 8 sin infarto de miocardio previo) fueron asignados de forma aleatoria y en doble ciego a recibir 15 sesiones de hipoxia intermitente en reposo (grupo hipoxia) o normoxia (grupo control) durante 3 semanas. Para el grupo de hipoxia cada sesión consistía en 3 a 5 períodos de hipoxia (14-10% oxígeno) de 3-5 minutos, con intervalos de normoxia de 3 minutos. Los del grupo control respiraban sólo aire normóxico de la misma forma. Tests de esfuerzo fueron realizados antes y después de las 3 semanas de programa respiratorio. Tras 3 semanas de hipoxia intermitente, el consumo de oxígeno pico tuvo un incremento comparado con las condiciones de normoxia (+6,2% vs -3%, p<0,001). Este aumento estaba estrechamente relacionado con el aumento del contenido de oxígeno arterial tras hipoxia (r=0,9, p<0,001). En el aumento del contenido arterial de oxígeno contribuían tanto una concentración de hemoglobina más alta, como una menor desaturación arterial de oxígeno durante el ejercicio. Durante el ejercicio submáximo (ciclismo a 1 Wat/kg) la frecuencia cardíaca, presión arterial sistólica, concentración de lactato sanguíneo y la percepción de esfuerzo disminuyeron tras la hipoxia intermitente en comparación al grupo control (en todos los parámetros citados, p<0,05). Los cambios en la respuesta al ejercicio tras la hipoxia intermitente fueron similares en los sujetos con o sin infarto de miocardio previo.

CONCLUSIONES: Tres semanas de cortas exposiciones a hipoxia intermitente en reposo aumentaron la capacidad aeróbica y la tolerancia al ejercicio en hombres mayores con o sin enfermedad coronaria.



Efecto de la Hipoxia Intermitente en el consumo de oxígeno durante el ejercicio submáximo en atletas de fondo.

Katayama K, Sato K, Matsuo H, Ishida K, Iwasaki K, Miyamura M. Eur J Appl Physiol. 2004 Jun;92(1-2):75-83

Research Center of Health, Physical Fitness and Sports, Nagoya University, Nagoya 464-8601, Japan.

El objetivo de este estudio era clarificar lo siguiente: (1) cómo el consumo de oxígeno (VO2) en estado estable durante el ejercicio disminuye en atletas entrenados tras un entrenamiento de hipoxia intermitente en reposo a corto plazo y (2) como los cambios en el consumo de oxígeno (VO2) durante el ejercicio submáximo se correlacionan con el cambio en el rendimiento de fondo tras hipoxia intermitente. Quince atletas de fondo masculinos participaron de forma voluntaria en este estudio. Cada sujeto fue asignado al grupo de hipoxia (n=8) o al grupo control (n=7). El grupo de hipoxia realizó durante 14 días consecutivos 3 horas diarias de hipoxia normobárica (12,3% de oxígeno inspirado). Tests de ejercicio máximo y submáximo, una prueba de tiempo en 3000 metros, y control hematológico en reposo a nivel del mar fueron realizados antes y después de la hipoxia normobárica intermitente. Los atletas de ambos grupos continuaros su entrenamiento normal en normoxia durante el experimento. El consumo de oxígeno (VO2) durante el ejercicio submáximo descendió significativamente (p<0,05) tras la hipoxia intermitente. En el grupo de hipoxia, el tiempo de carrera en 3000 metros tuvo una tendencia a la mejora (p=0,06) tras la hipoxia intermitente, pero no en el grupo control. No hubo cambios en el consumo de oxigeno (VO2) pico ni en los parámetros hematológicos en reposo en ninguno de los dos grupos. Había una relación significativa (p<0,05) entre la mejora del tiempo de carrera en 3000 metros y el cambio en el consumo de oxigeno (VO2) durante el ejercicio submáximo tras la hipoxia intermitente. Los resultados del presente estudio sugieren que la mejora en la economía de carrera resultante de la hipoxia intermitente pudo, en parte, contribuir a la mejora del rendimiento de fondo en atletas entrenados.




Efecto de un programa de entrenamiento físico e hipoxia hipobárica intermitente en la mejora del rendimiento físico de triatletas de alto nivel.

Rodas, G., Parra, J., Sitjà, J., Arteman, J., Viscor, G.
(2004) Apunts Medicina de l`Esport 144: 5-10

Durante 3 semanas, cuatro triatletas de alto nivel con una edad media de 32 años han participado en este estudio previo a la realización del Ironman Lanzarote 2003. El entrenamiento específico semanal constaba de 12 sesiones (12-18 horas) de modo que cada sector se entrenaba entre 3 y 6 veces por semana. Además, los deportistas realizaban una rutina de estiramientos musculares generales y un trabajo de fuerza resistencia en gimnasio. Coincidiendo con la primera y tercera semanas del estudio, los triatletas se sometieron a una exposición intermitente en hipoxia hipobárica (EIHH) alcanzando una altitud simulada de 5500 m al 3er día de estudio. Cada sesión tuvo una duración de 3 horas y los triatletas completaron un total de 12 sesiones repartidas, por igual, en esas 2 semanas de entrenamiento. Durante la experimentación los triatletas fueron suplementados con lactato ferroso (100 mg/día), vitamina C (1000 mg/día) y vitamina E (400 mg/día).

Durante el entrenamiento se produjo una reducción significativa de la FC de reposo en hipoxia (12,5 ? 3,7 latidos/minuto). El número de glóbulos rojos, la hemoglobina y el hematocrito aumentaron un 1% aunque las variaciones no resultaron significativas (ver figura). Por último, el rendimiento en una prueba de potencia aeróbica (prólogo de contrareloj simulado de 5,4 km) experimentó una mejora significativa, reduciendo en un 6,5% la duración de la misma.

variacion hematologia hipoxia intermitente triathlon

Los autores, con ciertas limitaciones experimentales al carecer de un grupo control, concluyen que la combinación de entrenamiento físico y sesiones intermitentes de exposición a hipoxia hipobárica producen una mejora significativa del rendimiento en triatletas de alto nivel.



Efectos de la exposición intermitente a la hipoxia normobárica sobre parámetros sanguíneos de deportes de resistencia

Hamlin M. J. y Hellemans J.
Lincoln University, Canterbury, New Zealand
Trabajo presentado en la reunión anual del colegio americano de medicina del deporte (Indianápolis, Junio 2004).

Participaron 22 deportistas de ambos sexos que entrenaban entre 8 y 10 horas a la semana, en un estudio doble ciego, para evaluar el efecto concomitante del entrenamiento y la exposición intermitente a la hipoxia normobárica (EIH). La exposición al gas hipóxico se realizó de modo intermitente (5 minutos gas, 5 minutos aire ambiente) durante 90 minutos al día, 5 veces por semana, por espacio de 3 semanas. la proporción de oxígeno del gas hipóxico fue de 13% al inicio de la primera semana para acabar al 10% hacia el final de la 3ª.

A los 2 y 12 días de terminar la exposición al gas hipóxico o al placebo se realizaron muestras de sangre que proporcionaron los siguientes resultados:

En el grupo EIH se produjo un incremento porcentual de la hemoglobina, del hematocrito y de los reticulocitos, así como una disminución del hierro sérico y la ferritina.

CONCLUSION: El Entrenamiento Intermitente Hipóxico da lugar a cambios en los parámetros hematológicos que sugieren una aceleración de la eritropoyesis.



Premio Internacional a Ferran Rodriguez

El American College of Sports Medicine (ACSM) ha galardonado al catedrático del INEFC (Institut Nacional d?Educació Física de Catalunya), Dr. Ferran A. Rodríguez, por un estudio sobre la Hipoxia Intermitente

En el estudio se han investigado los efectos de la hipoxia intermitente según un modelo de exposición desarrollado en el INEFC, a una altitud simulada de entre 4.000 y 5.000 metros, de cuatro semanas de duración, tres horas diarias y cinco días semanales.

La investigación, realizada con nadadores y atletas americanos de élite, incluye el estudio de los efectos de la hipoxia intermitente sobre la secreción de eritropoyetina, parámetros sanguíneos, cambios en el volumen plasmático y la masa total de hemoglobina, la función nerviosa autónoma, la respuesta ventilatoria a la hipoxia y, finalmente, sobre los parámetros de rendimiento físico en el campo y en el laboratorio.

De los resultados de la investigación, todavía en fase de análisis, se ha podido constatar, por primera vez, una intensa estimulación de la secreción endógena de eritropoietina no acompañada de una respuesta eritropoyética significativa. Lo que plantea la existencia de otros mecanismos adaptativos a la hipoxia intermitente de carácter ventilatorio y neurológico.





Efecto de la hipoxia hipobárica intermitente sobre la producción de eritropoyetina y otras adaptaciones hematológicas.

F.A. Rodríguez y colaboradores (2000).
Unidad de hipobaria Instituto de Educación Física de Barcelona-Universidad de Barcelona (INEFC-UB).

En este estudio los autores investigan el efecto de la exposición a una situación de hipoxia hipobárica sobre distintos parámetros hematológicos. Realizan dos estudios: en el primero, donde se exponen los sujetos a una situación de hipoxia hipobárica (hasta una altitud simulada de 5500 m) durante 90 minutos, se observa un aumento de la concentración de eritropoyetina plasmática (EPO) de un 55% (p<0,01) cuyo pico ocurre a las 3 h de finalizar la exposición; en el segundo, donde la exposición de 90 minutos se realiza 3 veces a la semana por espacio de 3 semanas, se produce un aumento significativo (p<0,001) de indicadores hematológicos de aumento de la masa de células rojas como el hematocrito (de 42,5 a 45,1%), los glóbulos rojos (4,55 x 106 a 4,86 x 106/mm3), los reticulocitos (0,5 a 1,4%) y la hemoglobina (14,3 a 16,2 g/100ml), sin que aumente la viscosidad sanguínea y que se mantienen a las 2 semanas de interrumpir el estímulo hipóxico. La saturación de oxígeno de la sangre arterial, durante la hipoxia, pasó del 60 al 78%. Estos resultados muestran la eficacia de una exposición hipóxica aguda (90 min) o breve (3 veces a la semana durante 3 semanas) para estimular la eritropoyesis basada, probablemente, en el efecto de la hipoxia intermitente sobre la producción de EPO.



Tasa de formación de eritropoyetina en humanos en respuesta a la exposición aguda a la hipoxia hipobárica

Eckardt KU, Boutellier U, Kurtz A, Schopen M, Koller EA, Bauer C.
J Appl Physiol. 1989 Apr;66(4):1785-8. Departamento de Fisiologia, Universidad de Zurich, Suiza.

Este estudio se llevó a cabo para investigar los cambios a corto plazo en la formación de eritropoyetina (EPO) en humanos, como respuesta a la hipoxia. Seis voluntarios fueron expuestos a altitudes simuladas de 3000 y 4000 metros en una cámara de descompresión durante 5 horas y media. Se midió la EPO por radioinmunoensayo en muestras de suero obtenidas cada 30 min durante la exposición a la altitud, y también en dos de los sujetos tras la exposición a la hipoxia (4000 m). Los niveles de EPO durante la hipoxia aumentaron significativamente tras 114 y 84 min (3000 y 4000 m), aumentando contínuamente durante el período investigado. La media tuvo un incremento de 16.0 a 22.5 mU/ml (3000 m) y de 16.7 a 28.0 mU/ml (4000 m). Este aumento en los niveles de EPO corresponden a un incremento de 1.8 veces (3000 m) y 3.0 veces (4000) en la tasa calculada de producción de la hormona. Tras el final de la hipoxia, los niveles de EPO continuaron aumentando durante aproximadamente 1.5 h y tras 3 h disminuyeron exponencialmente con un promedio de vida media de 5.2 h.



Más estudios relacionados con la hipoxia .

Productos relacionados

Precio: 2662.0 (IVA incluído)
+ Info | Comprar
Precio: 1573.0 (IVA incluído)
+ Info | Comprar
Precio: 459.8 (IVA incluído)
+ Info | Comprar
Precio: 169.0 (IVA incluído)
+ Info | Comprar
Precio: 211.75 (IVA incluído)
+ Info | Comprar
Precio: 3391.03 (IVA incluído)
+ Info | Comprar